Entradas

Mostrando las entradas de 2022

No la vas a hacer llorar

Imagen
  La vi. Resolví el misterio de la forma más insana, como siempre. No fue más que un - ay- , como una especie de vacuna. Cuando sos chica lloras y se siente como una daga clavada que rompe las fibras más débiles de tu hombro. Por suerte, ahora la aguja ni siquiera atraviesa la primera capa de mi pecho, porque ya crecí, aunque me costara. Te hubiese odiado. Mi estabilidad se hubiese roto nuevamente y volvería a torturarme de la manera más cruel pensándote al lado de ella. Pero te cuento que la situación en casa cambió bastante, y por eso, te dejo algunas sugerencias: La vas a mirar con admiración. Tus ojos se van a posar en ella, como si fuese la única figura nítida del panorama. Que no exista nadie más con la misma piel, con la misma sonrisa, con las mismas curvas de su alma. Vas a escucharla atentamente en cada momento que abra su boca. Vas a mirar sus labios y sus ojos detenidamente. Te vas a saber de memoria sus muecas, cómo levanta las cejas y si se agarra la panza cuando...

I. RELATO: muere un amor, nace un libro

Imagen
  Ayer volví a cruzar la puerta de un estadio y ver una pista. Era de color celeste claro, hecha del mismo material que tenía aquella que pisé en mi segundo Nacional. Ayer fue el mundial de patinaje artístico. Ayer vi a los mejores patinadores a través de mis propias pupilas, y nada más y nada menos que en mi país. Cuando entré al estadio, vi a una profesora que me había dado unas pocas clases para perfeccionarme. Ella siempre dictaba esas minis “clínicas”, y entonces la miré para confirmar que era ella, pero al instante lo supe. Mi memoria no es la mejor, pero las caras las recuerdo detalladamente. Al parecer ella también, porque habrá visto a miles de patinadoras pero sé que me reconoció, con esa mirada tan particular que tiene. Desistí a saludar porque nunca cruzamos un diálogo que fuese más allá de mis imperfecciones en un doble salchow o un touren. Me quedé tranquila porque, en cierto modo, no quería encontrarme con mucha gente. Y de repente me di cuenta que estaba ahí, en...

Los casi y las noches

Imagen
  Otra noche en donde apareces cuando ya casi no te esperaba. Otra noche de las tantas en las que te pienso, pero esta vez desde el frente. Hace mucho que no me acordaba del roce de tus dedos en mi piel, de cómo me miraban tus ojos antes de que la ilusión se derrumbara. No te llamaba como las olas por pura casualidad, en cierto modo era mi intento de poetizar tu nombre. Si me salió de forma natural habrá sido por tu persuasión que me acorraló desde un principio y que me terminó ahogando en tu propia arena. Siempre sentí que tu sonrisa era la más perfecta de todas. Me recrimino por haberte adorado durante horas mientras dormías, cuando yo sólo podía saludar al insomnio diciéndole “buenas noches” e invitarlo a que se pusiera cómodo. Me recrimino por darte la llave y valorar tanto tu forma de cuidarme aunque sólo haya sido en un aspecto, cuando en todo lo demás yo era simplemente el resto de la división. No sé, tuve demasiadas noches en donde te recordé con dolor e ira, nunca por se...

Romper el hilo rojo

Imagen
     Si sé que trajiste a flote mi envidia Si sé que fui útil para tapar tu falta Si sé que lo mejor fue que aterrizaras en las islas más lejanas a mi cuerpo Si sé que pude crecer, no por vos, sino  a pesar  de vos Si sé que mostrarte un libro equivalía a romper las hojas de cualquier árbol en plena primavera Si sé que sacaste mi sombra y la puliste de la mejor manera Si sé que me hiciste ser menos mujer y más tuya Si sé que cada golpe en las costillas fue simplemente una brisa en tu pelo Si sé que nada de todo esto fue sincero Si sé que tenías todo de mí  pero vos no eras ni un poco mío Si sé que aprendí aunque hayas equivalido a miles de piedras enormes en el camino Si sé que fuiste consciente en todas y cada una de las veces en las que elegiste no estar conmigo -Si sé que esto nunca tuvo nada que ver  conmigo- Si sé que  nunca fue amor Si abrazarte era caer intencionalmente en la hoguera Si adorarte era entrar a las tentativas del diablo Si el ...

Despedite vos primero

Imagen
  ¿Cuándo voy a poder hacer el duelo de no tenerte? ¿Cuándo voy a poder hacer el duelo de que me tengas atada a una soga de la cual solo vos podes tironear? ¿Cuándo voy a poder desatar esa soga? ¿Cuándo voy a poder despedirte completamente? ¿Cuándo voy a poder bajar el cuadro con tu foto? ¿Cuándo voy a poder cambiarla por otra más real? ¿Cuándo voy a cerrarte la puerta? ¿Cuándo voy a tomar esa decisión? ¿Cuándo me voy a hacer cargo del dolor que me generas? ¿Cuándo voy a poder valerme por mí misma?  ¿Por encima de lo que me hiciste creer que era?

¿Carta de amor o de despedida?

Imagen
A veces me pregunto si esta es la carta de despedida número cien, número ciento uno, que te escribo. Hasta pensé en escribirle a mi abuela pero a ella la despedí cuando tenía trece, y sus recuerdos no me fantasmean tan recurrentemente. Vos, en cambio, sos la contracara. Lo que al principio resultaba ser ternura, abrigo y acompañamiento, hoy es desconsuelo, vistas por lo bajo, refunfuños por no recibir tus palabras. Otras tantas veces, tampoco tengo ganas de amar.  Tengo absolutamente todo para recriminarte. La imposibilidad de disfrazar tus actos insolentes ya no me cubre, no me sana, ni yo misma me los creo. Como para creérselos... si tan sólo te vieras. Si tan sólo vieras el daño causado, las flores marchitas, el jarrón tirado y las manos sucias. Pero nada te alcanza para que te des cuenta. Te lo puse todo sobre la mesa, como el agua más clara de islas caribeñas, aquellas que brindan un cálido confort. Así traté de ser yo, traté de ser buena, traté de abrirte puertas a mis demoni...
Imagen
 
Imagen
 

Fusión (in)suficiente

Imagen
Con vos hablo de todo. Y a la vez no. Sabemos bastante lo que al otro le gusta, quizás porque nos atrae lo mismo en muchos sentidos. Quizás porque nuestras percepciones se sientan iguales, o casi. Hablamos sobre nuestras opiniones. Releemos historias, analizamos canciones, estados de ánimo de los artistas que nos parecen nefastos y de los que nos clavan el cuchillo en donde más nos duele. Hasta soñamos con intervenir y, sobre todo, prevenir todos los males que ahondan en cada conexión de las neuronas de nuestro maldito y fascinante cerebro. Pero de nuestras cosas no hablamos. Lo íntimo no lo tocamos, al menos no en profundidad. Nos hemos llegado a mostrar nuestras palabras más dolorosas y tragicómicas posibles. Nuestras cartas a gente que lloramos y a quienes les mendigamos disculpas. Disculpas por nuestro dolor. O al menos, que sean conscientes de las heridas que nos relamemos día a día. Y aun así desatendemos el trasfondo. No sé qué te pasó. No sé qué te hizo llorar con un hueco en e...

Cadena

Imagen
Varón Creíste que era tuya Mis emociones tuyas Yo entera Enterita Para vos Ya nunca más yo Como tu extensión Como tu hembra dócil Como costilla No me cortaste las alas Recién ahora me están saliendo Yo solita saldré volando.

Bienvenidos a mi audiencia

Imagen
Damas y caballeros: Muchas gracias por venir Damos inicio a la prueba más intrascendente del mundo Sea dichoso o dichosa quien no deje caer sus convicciones He aquí las bases y condiciones para tener el privilegio de mirarme a los ojos Y no derramar lágrima (Precipitarse no sería un conflicto) Deberán alzar las manos aquellos que osen de suficiente valentía Así que les consulto: ¿Quién me preguntará si prefiero la gloria o la paz? ¿Quién escuchará mis diálogos interminables? ¿Quién creerá realmente en mi inteligencia? ¿Quién confiará en mi voz lisa y llanamente? ¿Quién aguantará mis quejas ante la injusticia? ¿Quién admirará mis tristes venas sin atreverse a acariciarlas? (Cinco manos levantadas) ¿Quién me cederá la palabra cuando quiera defenderme de los que me rodean? ¿Quién me pondrá el escudo en la espalda ante mi vulnerabilidad? ¿Quién me respetará cuando yo no lo haga? ¿Quién me felicitará por mis poemas sin intenciones por detrás? ¿Quién verá en mí lo...